Específico La Sagra SkyRace del Maestro

Ruta Circular
9Km aprox. en 2h 50'
Desnivel +: 1.250m


Hola amigos troteros y troteras de la vida. Hace poco menos de un año, estaba yo con mis cosas, que no tenían nada que ver con las de ahora en ningún aspecto, y fui a acompañar a mi prima a Galifa, al pueblo de mi abuelo, porque su marido hacía una carrera, la Cartagena Trail. 

Cuando llegamos mi prima y yo al poli de Galifa con el carricoche de la cría y todo, y vi el buen rollo que se respiraba, el compañerismo, los abrazos y la alegría de todos, la música que acompañaba, todo el pueblo y las familias volcadas, paella y cerveza para todos.... Se respiraba alegría, pasión, amistad, apoyo de todos con todos, la montaña donde me había criado detrás... Ese día, algo se encendió dentro de mi. 

Le dí forma a lo que necesitaba emocionalmente. Yo no había hecho deporte en mi vida, a excepción de los inviernos en el gimnasio, un par de días por semana, pero nada de correr. Algo de monte porque me gusta, pero siempre con mucho esfuerzo. 

A veces Dios se manifiesta de las formas más inescrutables. Aquel día decidí que en la siguiente edición de aquella fiesta yo estaría allí, dentro de aquel mogollón de abrazos y de amigos, participando y siendo una más. Por supuesto no tenía ni idea de cómo lo iba a hacer, si ni mi cuerpo ni mi mente estaban preparados, y para mi era un esfuerzo sobrehumano. Decidí empezar el camino, dar el primer paso y lanzarme. Y lo haré, estaré allí un año después, porque decidí hacerlo y dar ese primer paso.

Pues con esto pasa un poco lo mismo, érase una vez el maestro Juande y sus específicos para máquinas totales, va y organiza uno de subir corriendo La Sagra y yo voy y me apunto. No sabía cómo iba a hacerlo, pero no me importaba, sólo sabía que iba a hacerlo. Y lo hice, lo hicimos todos.

Quedamos a las 6 de la mañana en la casa del maestro y desde allí tiramos millas hacia la conocida Puebla de Don Fabrique (buenos lomos, por cierto).

Aquí estamos todos, algunos más acojonados que otros, a punto de empezar el ataque.


No diré que fue fácil, nada más empezar y por la carretera ya empezamos a trotar, como a las 8 de la mañana, para calentar, decían... Vaya tela esta gente. Aquí todavía ibamos juntos.


El caso es que poco a poco empezamos a subir por la pistica que ya conocía, y siempre hacia arriba hasta toparnos con una pared vertical como un rascacielos.


Subiendo subiendo, hay un bosquecillo en vertical, como el que pone los árboles en una pared, que nos recibe ocultándonos entre ellos. A todo esto el grupo de Juande había tomado piola como dicen en quitapellejos y ya sólo se les oía de lejos. Por suerte, mi compañero asignado a mi cuidado no me perdía de vista y cuidaba de que no me hubiera despeñado en algún paso en falso.


Luego llegó la sorpresa, había que atravesar la pedrera.... sin mirar mucho abajooooooo! 



Con el honor de estar en el mismo equipo de las personas a las que admiras, nuestra Esther Sánchez, esa tarde hizo podio en el Sapo, vamos, de otra pasta. 



Aquí las vistas del grupo de cabeza.






Y a poco a poco fuimos divisando la cima, que nos recibe con una agradable paseo que hacemos con ilusión, mientras también poco a poco nos recibe un frío que pela.... 




Compensado con los ánimos que dan los chicos que ya han llegado a la cima, que nos esperan hasta que llegamos. Aquí el grupo en la foto de rigor, mientras al fondooo se divisan dos corredores que llegan...


Y esto era lo que estaba pasando unos metros más a la derecha de estos campeones... Dos aspirantes a punto de tocar la cima de la Sagra subiendo con rabia los últimos repechos antes de la cima.



Mi compañero fue más rápido que yo y tuvo de recompensa un recibimiento en la cima que 
nuestros compañeros le marcaron, que sin duda será difícil de olvidar.


Y después de tocar cima, tuvo el valor de bajar por mí y volver a subir para que sea yo quien toque geodésico de 2.381 metros de nuevo mientras nuestros compañeros ya emprendían el camino de bajada. 


Tengo que decir que me llenó de orgullo y humildad a la vez (sensaciones de esas que te da la montaña) que cuando yo subía, una campeona como Esther Sánchez, el Maestro, y los mejores corredores eran los que me decían ¡Enhorabuena Laura! ¡Muy bien, vamos campeona! mientras agotaba la última gota de aire para subir a la cima, sólo por ese momento ya me valió la pena las horas de la subida y hasta los entrenamientos anteriores que me han llevado a ese preciso instante.

 

Aquí nuestras caras de ¡YASTAAAA! con el maestro felicitándonos, y nosotros a él, por marcarnos un pedazo de específico nada menos que a la cima de La Sagra.
 
 

Y eso es todo amigos, feliz por haberlo intentado y haberlo hecho, lo que me dio fuerzas más que suficientes para el siguiente específico, el entrenamiento de la mini yeti, no sin antes pasarnos por El Algar, a ver a los troteros y amigos que corrían el cross de la Subida a la Fuente del Sapo, y tomarnos un refresco de limón con ellos, o lo que fuera que llevaba el amigo Julián Víctor en la nevera :P

¡¡Enhorabuena Toñi!! Eres la mejor y todos lo sabemos! Te queremos guapa!

 

Aquí posando con el regalito de la organización...

 
Y así concluyó un día que comenzó a las 6 de la mañana en una estación de tren... Vendrán tantos días buenos que no habrá memoria para retenerlos, por eso cada segundo cuenta. 
Nos vemos en la MiniYeti, próximo post. 
¡Buen camino!

Cross Solidario de Perín

Ruta circular
12Km Corredores
8Km Senderistas
Desnivel positivo: 371.55 metros
 

Bueno, bueno... cuánto tiempo si aparecer por aquí. Y como lo prometido es deuda, y sé que el maestro Juande está esperando la crónica, pues afilo el teclado (que no la lengua por ahora ;P) y allá voy...

Empezaremos diciendo que Perín es el pueblo de mi abuela Lola:


Un día de los que iba mi abuela cargada de cántaros de leche por aquellas colinas que nosotros hemos hecho con una equipación técnica maravillosa y carísima, aquí la amiga se las hacía igual con las esparteñas y cargada hasta las cejas, surgió el amor con un mozalbete de ojos verdes y aire pícaro que llevaba una Mobilette de agárrate que vienen curvas.
 

El amigo en cuestión bajaba todos los días desde su pueblo, Galifa, a rondar a la chiquilla y como en aquellos tiempos los noviazgos eran mas cortos que los de ahora por razones que todos comprendemos, el Sr. Justo Sánchez AKA "El pequeñín" y la menor de cuatro hermanas se dieron el sí quiero en la iglesia donde comenzamos esta ruta.

Total no es guapo ni chulo mi abuelo....


 Aquí galanteando a la moza por aquellos portales.

 

Aquí para que veaís lo diferente de la Iglesia donde dimos comienzo el cross, por cierto la nena de la foto es mi mamá :D

 

En la casa familiar, el gran día con el acueducto de fondo y los dueños de la Venta "El Lirio": mi tía Fina hermana de mi abuela y mi tío Miguel.


A estos abuelos siempre los hemos llamado los abuelos viejos, ojo que yo los conocí 24 años después de esta foto, que por cierto fue el 10 de julio de 1955.


Bueno, después de esta entrañable introducción (a qué venía todo esto, ah si!) ya podemos entrar en el Delorean y situarnos 58 años después de este feliz enlace.

Pues un día al amigo Ramón Garrido se le ocurrió que ya que estamos en fiestas pues vamos a organizar la quedada de los muflones, troteros, andarines y gente que pasaba por allí. Con el fondo de una causa benéfica, recaudar dinero para comprar juguetes a los niños ingresados en la planta de oncología del Hospital de Santa Lucía.


Así que sin más, acudimos a la llamada de este hombre, con la intención de pasar una tarde como poco agradable a la par que calurosa. Con este perfil a la vista comenzamos.


Aquí con la jefa de camino al evento... Empezaba a hacer una chispa de caló! Mae mia!



Hubo unas 200 personas que entre todos logramos recaudar 1.600 euros.






Como os digo, hubo de todo: Desde auténticos muflones curtidos en mil batallas... 

 

Como amigos para los que era su primera carrera por montaña como corredor, y no como senderista, que aquí está con su pequeño pony... XD 


Con mi chiquitín!


Las chicas nos queríamos hacer la foto tambien con los burricos pero menos valientes nos pusimos a una segura distancia...



Y en fin a trotar sea dicho... 



Comenzamos saliendo de la iglesia hacia la rambla por una subidica que nos daba la bienvenida a lo que venía detrás.

Caminos de tierra fina como arena de playa caribeña de esa que se te pega en la piel sudada y te realza el moreno estupendamente.


La verdad sea dicha, la rutica estaba currada, con señalizaciones en cada cruce y hasta un avituallamiento al km 4, después del cual ya se bifurcaba el sendero en corredores pa la izquierda, senderistas a la derecha, por el cual cuando pasamos my friend Ana Fe y yo nos miramos y en un momento de lucidez me cambié de bando por un día y seguimos corriendo los 4 km. restantes.

Aquí el maestro Juande, subiendo con más arte que yo... Pero siempre he aprendido muy rápido así que muy prontico te voy pisando los talones (jajajaja..... Me río yo sola). Un abrazo Maestro!! :***




Cuando vimos las cuestas que teníamos delante creimos moriiiiir! Y eso que habíamos pasado por la duchica del primo de Molero, qué sorpresa!!!





Por el camino vimos al tío Ramonico que con amabilidad nos había preparando unos pasodobles en el cassete de su Peugeot 106, y nos advirtió de las cuestas que venían después... 






Aprecien que mi sonrisa de desesperación no está casi nada forzada ;S




Aquí un extracto de conversación con un lugareño, al escucharnos algo parecido a: Bijainnnnnnn de cuestas, bijainnnnnn de caló y bijainnnnnn de $%$¿^+`$%!!

-¡Vosotras es que no sois de aquí y no lo sabéis! 
-¿Cómo que no? Le contesté. 
-¿Usted conoce al Pequeñin? Yo soy su nieta...
-¡Hombreee claro! Yo soy el Ramonico, dile que me has visto!







Y con esto quedó patente que tal como sentía, estaba en mi casa, correteando por allí como una cabra, y empapada de sudor.


Subiendo las últimas cuestas del Nivel: ¿Esto es una broma, no? Nos encontramos por sorpresa con un segundo avituallamiento en lo alto de la morra.



Y..... ya no quedaba casi nada... Al ir llegando me encontraba corredores ya en chanclas que me decían, ¡Vamos que queda muy poco! ¡Campeona! jaja! Algún día llegaré con vosotros, y gracias a estos ánimos hasta me lo creo y todo.

Llegamos a la hora y media larga (U mas...) y nos recibieron con unos bocatas, cervecica y empanadillas recién hechas.... Uhmmmmmmmm!!!

Siento los ojos rojos, a ver si actualizo la foto cuando pueda y la cambio =)



Y colorín colorado, la I Carrera / Quedada Pedestre Deportiva Solidaria de Perín se ha acabado. Aunque como era sábado por la noche y aún era temprano y por qué no decirlo, que nos va la marcha cantidad... Pues empalmamos unos cuantos y nos fuimos a buscar al amigo Gerardo que hacía su ruta por Castillitos. 

Madre mía, con los pies hechos carbón, allá nos fuimos a encontrarnos con el grupillo y echar unas risas por si nos habían faltado esa tarde.


En fin, un día muy completo que concluimos con su tradicional estiramiento en la AVV del Campillo de Adentro, los que siempre nos quedamos a cerrar los bares.

Un abrazo a todos, nos vemos en la próxima y como siempre:


¡Buen camino!